En la magia de la Navidad, nuestros niños de 3 años recibieron un regalo único: el abrazo al Niño Jesús. Caras de sorpresa y emoción iluminaron la Misa de Navidad, donde las manos prodigiosas de María Torres, con su infinita dedicación, nos recordaron que el AMOR se crea y se comparte. 

Rodeados de sus compañeros y familias, nuestros pequeños descubrieron que el Niño Jesús no solo se entrega en figura, sino también en espíritu, para enseñarnos el significado más puro de la unión y la esperanza.


