En un día lleno de magia y ternura, nuestros queridos pequeños de la Casa Milagrosa son envueltos por el cálido abrazo de sus compañeros de colegio y sus familias.
Tras recibir la bendición del Niño Jesús, los niños lo abrazan con una emoción desbordante, devolviéndole un pedacito del inmenso
AMOR INFINITO
que ÉL nos brinda.


Y ese AMOR…, es el mismo que Mᴀʀɪ́ᴀ Tᴏʀʀᴇs dedica a cada una de las maravillas que ha creado. Siempre agradecidos por tantas bendiciones que nos regala en estas fechas.